Buscando recetas apetitosas y coloridas (me gusta la comida de colores) para las comidas especiales de Navidad, me encontré con esta
receta y aunque la utilizan como postre yo la he combinado con una rodajita de queso de cabra en rulo para tomarla como aperitivo.
El contraste de sabores es una ¡¡pasada¡¡.
Y está delicioso tanto tomado tibio como cuando se enfría.
Ventaja a tener en cuenta cuando tenemos que preparar muchos platos.