Esta receta es una de las muchas que hay a lo largo de nuestra geografía. Yo la he tomado prestada de El Gran Llibre de la Fruita Dolça escrito por Josep Lladonosa i Giró. Pagès Editors, S.L., 2001. Lleida.
Para adaptarla a nuestros intereses he utilizado panela granulada en sustitución del azúcar blanca y aunque las cantidades de los ingredientes son las originales del libro realmente tendremos que ajustarnos a la cantidad de fruta que tengamos disponible.
Ingredientes
2 kg membrillo
2 kg panela granulada o azúcar moreno
1/4 litro de agua aproximadamente
Preparación
- Pelamos los membrillos, los cortamos a cuartos y les quitamos las semillas.
- Los ponemos en una cazuela cubiertos con agua a cocer y cuando estén blandos los sacamos y los aplastamos con un tenedor.
- Pesamos y añadimos la misma cantidad de azúcar.
- Ponemos en una cazuela con el vaso de agua y cocinamos a fuego lento, removiendo muy a menudo para que no se pegue a la cazuela. La cocción dura aproximadamente una hora y media. El azúcar se irá caramelizando y el membrillo tomará ese color rojo oscuro tan característico.
- Cuando termina la cocción lo ponemos en un molde de cristal, barro o cerámica y dejamos enfriar.
El membrillo lo tomaremos con queso. A mi me gusta sobre una galleta integral y con queso de cabra. Y para los más atrevidos sustituid la galleta por una patata frita de bolsa, rizada gruesa.